Reflexión de cierre

Llevar a cabo una tarea tan compleja como la educación, especialmente en colaboración con otras personas, ofrece una amplia gama de ventajas y beneficios tanto para quienes la desempeñan como para quienes reciben su impacto. Entre estos beneficios se encuentran la posibilidad de apoyarse mutuamente, una distribución más equilibrada de las responsabilidades laborales y el enriquecimiento personal y profesional que surge del intercambio con los colegas. No obstante, esta colaboración también implica retos y compromisos. Formar parte de un equipo requiere poner al servicio de la organización nuestras capacidades, convicciones y habilidades. La coherencia en las acciones individuales dentro de los centros educativos solo puede alcanzarse cuando docentes y demás miembros de la comunidad educativa establecen y respetan acuerdos basados en principios y criterios comunes. Esto exige superar enfoques individualistas, desarrollar una visión más global del trabajo y construir acuerdos sólid...